El santuario dedicado a Nuestra Señora de la Sabina, debe su creación a la aparición de la Virgen a un pastor sobre una sabina, árbol emblemático en la comarca.
La talla de la Virgen es sedente, a modo de trono para el niño Jesús que sustenta en sus . piernas, podría ser de época románica, aunque ha sufrido varias modificaciones, por lo que es muy difícil saber su procedencia.
El origen de la ermita de la Sabina se remonta al siglo XIII, bajo la baronía de Pedro Cornel y Luna, tercer señor de Farlete, que construyó una iglesia gótica, hoy absorbida por la fábrica barroca. Sin embargo, todavía se puede encontrar parte de esa primera construcción a la derecha de la casa del santero, lugar denominado la mezquita. Las partes conservadas de la construcción primitiva han sido modificadas al sustituir las vigas de madera por bóvedas y la construcción de la escalera de acceso al coro.
Esta primitiva ermita sería de pequeñas dimensiones (15 x 5 metros) de una sola nave con forma rectangular, y viendo la estructura de la bóveda con arcos apuntados, sería muy similar a la visión invertida de una quilla de barco.
El presbítero Fray Roque Alberto Faci recoge la tradición de la figura de la virgen de Nuestras Señora de la Sabina en la ermita: “ (…) se venera con gran piedad y devoción la antigua y milagrosa Imagen de la Stma. Virgen Ntra. Sra. De La Sabina en hermosa y bien cuidada ermita: así llamada por haberse aparecido en un árbol de Sabina (que abundaba mucho en estas tierras de los Monegros en aquellos tiempos) y que ocupaba el sitio donde erigió el Altar de la primera ermita… A un pastor , con el mensaje de Fe-Esperanza amparo y protección, para . estas sencillas, humildes y cristianas gentes que , con mucho sacrificio y esperanza, trabajaban las tierras para cosechas de cereales, de los boques y el carbón que también de ella elaboraban y que vendían en Zaragoza como medio de subsistencia. En sus principios, la imagen aparecida, se llamó Stma. Virgen Ntra. Sra. De Farlete, hasta que al constituirse la Cofradía en la citada Ermita en el día de su Fiesta 8 de Septiembre del año 1444, quedó definitivamente con la Advocación Actual lo mismo que el nombre de la Cofradía.
En 1680, se pidió al arzobispo de Zaragoza la posibilidad de construcción de una nueva por parte de Don Guillén Ramón de Moncada, señor de Farlete y sexto marqués de Aytona. Esta nueva ermita se construyó sobre la anterior y siete años más tarde del inicio de su construcción el 7 de septiembre, se trasladó desde la iglesia parroquial a la ermita la figura titular.
La nueva construcción tiene la siguiente disposición: atrio, iglesia, camarín, cripta y sala capitular. A esta construcción se le añadió una vivienda para el sacerdote y un pequeño albergue con capacidad para 30 personas, para alojar a los peregrinos o romeros que se dirigen hasta la ermita.
Como en el antiguo edificio se mantuvo la estructura de nave única(39 x 14 m) y en este caso se cubrió con bóveda de cañón con lunetos. Mientras que la cripta fue restaurada y transformada en capilla en los años 60 por los “hermanitos de Jesús” de Charles Foucauld.
En la nave de la iglesia y sustituyendo los antiguos altares de las capillas, muchos de ellos desparecidos durante la Guerra Civil, aparecen unos pirograbados de José Aznar que representan 6 escenas de la vida de la Virgen y de Cristo: Anunciación, Nacimiento de Jesús, Crucifixión, Resurrección, Pentecostés y la Coronación de la Virgen. Rematando bajo los arcos de medio punto encotramos unas decoraciones pictóricas que representan: una bandera blanca con una cruz roja y flores, una paloma blanca portando una rama de olivo, dos palomas sobre una rama de donde sale una flor rosa, una paloma sobre un rama con unas flores blancas y un carcaj de flechas con un arco.
El santuario fue restaurado en el año 1997 por decisión de la Junta Rectora del Patronato del Santuario de la Virgen de la Sabina. Durante estos trabajos se encontraron pinturas del siglo XVII representando un sol y un calendario mensual con una flecha señalando el mes de septiembre, mes en el que sabemos se consagró el templo.
Uno de los lugares más importantes de esta ermita es el camarín, que se sitúa tras el altar. Tiene planta ovalada y se cubre con una bóveda rebajada sobre pechinas. En la parte inferior, el muro está decorado con pares de columnas adosadas de orden compuesto, toda la capilla está decorada con estucos simulados. Entre los pares de columnas aparece la figura de la titular, un trampantojo que simula un monaguillo entrando en la capilla, la escena de la aparición de la Virgen al pastor sobre la sabina (muy deteriorada) y, el último espacio del muro está ocupado por la puerta que da acceso al camarín.
La imagen que representa la aparición al pastor está restaurada respetando los pocos restos de pintura mural original que quedaban y en la restauración también se mantuvieron los agujeros de bala que quedaron tras la guerra civil, además también aparecen inscripciones relativas a los grupos anarquistas que aquí se resguardaron du rante la contienda CNT y FAI. Todo el espacio está decorado con pintura de temática mariana. La policromía se realizó a finales del siglo XVIII y algunos han querido atribuir la autoría a Fray Manuel Bayeu, quien decoró la cercana Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes situada en Lanaja, también en la comarca de los Monegros, gracias a la restauración en el año 2011, fue posible hacer la atribución así como contemplar la temática allí representada. Sin embargo, otros también han querido ver representado al autor de las pinturas a la derecha de la imagen de la Virgen en la escena de la Asunción.
En cuanto a la iconografía:
La decoración pictórica empieza en un círculo donde se representa al Espíritu Santo en forma de paloma, desde este círculo parten cuatro rayos solares que dividen la bóveda en cuatro partes para representar 4 letanías de la Virgen, cuyas representaciones son portadas por dos querubines y de cuelga una filactelia explicativa: espejo de justicia, casa de oro, rosa mística y torre de David. En las pechinas aparecen representadas cuatro de las ocho mujeres fuertes del Antiguo Testamento como son: Judith que aparece con la espada y la cabeza de Holofernes; Débora vestida de guerrera, fue jueza y profetisa, con su firmeza y astucia derrotó a los ejércitos de Jabín, ayudada, entre otros, por otra de las mujeres que aparece representada en las pechinas que es Yael (también Jael), que acabó con la vida de Sísara general de las tropas de Jabín, clavándole un martillo y un clavo, con el que aquí aparece representada. Y, por último, Esther coronada como reina.
Debajo de la cúpula en la parte superior de los muros encontramos unas pinturas relativas a la vida de la Virgen: Anunciación, Huida a Egipto y Asunción de la Virgen, la cuarta escena está perdida, a día de hoy reemplazada por una ventana sobre la puerta de entrada al camarín, que permite mayor iluminación del espacio.
Por encima del vano donde se coloca la imagen de Nuestra Señora de la Sabina aparece un frontón decorado con una inscripción: “SE PINTO A EXPENSAS DE LA COFRADÍA EN AGOSTO DE 1790”.
En los espacios entre las columnas aparecen otros símbolos de tradición mariana como son: el ciprés y la palmera, el sol y la luna, la estrella, la puerta del cielo, el pozo de aguas vivas y fuente sellada.